El conflicto entre Rusia-Ucrania y el reciente conflicto en la Franja de Gaza siguen siendo puntos críticos donde Alemania buscará marcar su Política Exterior. Así lo informó en un artículo el Ministerio Exterior Alemán (Auswärtiges Amt), donde también aparecen el cambio climático y la búsqueda de nuevos socios estratégicos. Sorprendentemente, solo se mencionan algunas líneas respecto a China y nada sobre la Política Exterior Feminista.
Más apoyo y tratar la reconstrucción de Ucrania
Desde los primeros compases de la guerra desarrollado luego de la intervención militar del Presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin la diplomacia Alemana alrededor del mundo se ha concentrado en lograr que sus aliados condenen las acciones llevadas a cabo por Putin, para así lograr una firme condena internacional. Como fue avanzado por la Sociedad Uruguayo-Alemana de Política Exterior en su artículo: ¿Cuánto apoya Alemania realmente a Ucrania? Los números. Alemania es el segundo país tras Estados Unidos que mayor cantidad de ayuda (medida en billones de Euros) ha enviado a Ucrania.
Nuevos paquetes de ayuda para Ucrania y de sanciones a Rusia
El Gobierno Alemán comunicó para este invierno un nuevo paquete de ayuda, puntualmente el 10 de octubre del pasado 2023. El llamado »Winterpaket«, según explicó en Ramstein el afamado Ministro de Defensa Boris Pistorius (SPD) la ayuda estaría centrada en elementos para la defensa, área, munición y armas en general. También dentro de ese paquete están incluidos más de los controvertidos Tanques Gepard. Para los más versados en el tema armamentístico, los sistemas de defensa PATRIOT e IRIS-T volverán a escena.
En resumen, este «Winterpaket» tuvo un costo de mil millones de Euros para el Gobierno. El plan para este año, según el Ministerio Exterior, es »elevar la ayuda militar a unos 8 mil millones de Euros«, pero no hace alusión alguna a la ayuda humanitaria y financiera, la cual seguro será un punto vital, más aún teniendo en cuenta el ahorro que deberá hacer el gobierno y la reconstrucción de Ucrania.
Conferencia para la reconstrucción de Ucrania
En el transcurso del pasado año, el tema de la reconstrucción de Ucrania estuvo poco sobre la mesa, al menos, la diplomacia occidental no se concentró en este punto. La Unión Europea con sus miembros en conjunto bosquejó un plan de acción de 3 etapas para dicho proceso.
Alemania este año acogerá la Segunda Conferencia para la Reconstrucción de Ucrania, será en junio y probablemente dentro de la misma sea tratado el tema del ingreso de Ucrania a la Unión Europea.
Esfuerzos diplomáticos más severos en el Medio Oriente
La Guerra entre Israel y Hamás librada en la Franja de Gaza fue una complicación extra para la diplomacia occidental. Con dos frentes abiertos (Rusia-Ucrania sumado a Israel-Hamás) y un tercero que podría abrirse entre China y Taiwan, Occidente ya no se siente cómodo en este teatro de operación planteado en un mundo tan volátil como la pólvora. Es por ello que muchos analistas condicen en que la diplomacia deberá moverse para obtener una rápida solución y que no ocurra lo que está ocurriendo en Ucrania, donde las negociaciones parecen cada vez más distantes.
Este fue el movimiento que planteo la diplomacia Alemana, con los primeros días del año 2024, la Ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock (Bündnis 90/Die Grünen) viajó a Oriente Medio para disminuir el riesgo de un conflicto regional. Este es el trabajo que tendrá por delante Steffen Seibert, el Embajador Alemán en Israel. Trabajo que no será menor y pondrá a prueba a un Embajador que no tiene formación diplomática.
La alianza Transatlántica
No es un secreto que Alemania es un socio fundamental en la OTAN, de hecho la diplomacia alemana pone grandes fichas para cuidar dichas relaciones y seguir teniendo un lugar en el tablero geopolítico. Con el auge del grupo BRICS, Alemania y el occidente buscan mayor fuerza y mayor influencia geopolítica en territorios donde ha ido paulatinamente perdiendo fuerza frente a otras potencias como China, como el caso de África y Sudamérica. Uno de los puntos donde Alemania busca protagonismo es en Lituania, donde buscará junto a la OTAN seguir presionando a Rusia y particularmente en este caso a su socio Bielorrusia. Para ello buscará enviar una brigada permanente a Lituania, para continuar con la tarea de garantizar la seguridad de dicha nación y seguir aportando a la modernización de su ejército.
La diplomacia del clima más potente que nunca
Alemania se transformó casi sin notarlo en el impulsor de una nueva diplomacia, la diplomacia climática. Con distintos socios alrededor del mundo y puestos estratégicos en las Embajadas, busca desde hace algún tiempo cambiar el paradigma natural de contaminación y emisión. Al frente de esto aparece sin lugar a dudas Annalena Baerbock, la cual desde que asumió en 2022 puso este punto como un pilar fundamental de la Política Exterior Alemana. La pandemia del COVID-19 y la guerra entre Rusia y Ucrania no permitieron él, integró desarrollo de estos objetivos, pero este año se tratará de lograr mayores logros y conseguir nuevos socios estratégicos. Lo cierto es que en el contexto internacional será complejo lograr negociaciones para el impulso de acciones climáticas. Mismo dentro de Alemania, la inflación, el descontento con el Gobierno y el problema del Haushalt (presupuesto) será difícil lograr resultados grandes que cumplan las expectativas.
La situación política internacional es un punto de alto impacto en este tipo de políticas que apuntan a la desindustrialización típica, algo muy difícil cuando las grandes naciones se están abasteciendo militarmente como nunca, con las necesidades industriales y de recursos que ello conlleva. Ninguna nación estará dispuesta a sacrificar industria y seguridad a cambio de intereses climáticos. Este será el gran desafió que Alemania y sus socios tendrán por delante.
China: el gran elefante en el cuarto
La diplomacia en cuanto a China parece ser el punto más problemático para Alemania, más que Ucrania o cualquier otro. De hecho, el tema China retrasó durante meses la Estrategia de Seguridad Alemana, la cual debía presentarse para la tercera semana de febrero del 2023, para la Conferencia de Seguridad, celebrada en München. Finalmente, la misma fue presentada en junio, en un documento que abarca unas 60 páginas.
El documento plantea una nueva mirada hacia Pekín y hace eco en que Alemania debe de ser más independiente del País Asiático. En ese aspecto, Alemania plantea una especie de aprendizaje obtenido del conflicto entre Rusia y Ucrania. No quiere ser dependiente de una única nación en infraestructuras críticas, como por ejemplo energía.
El documento presentado en una conferencia de prensa es un lineamiento por momentos difícil de imaginar cómo podrá ser llevado a cabo, por eso es sin dudas uno de los mayores motores que impulsará la diplomacia. Lo que no cabe dudas es que si Alemania quiere depender menos de China deberá de buscar socios, por eso el Acuerdo Mercosur-Unión Europea tendrá un rol protagónico, especialmente para disminuir la influencia del gigante asiático en la región.
